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Cualquiera que sepa pintarse las uñas con un esmalte tradicional es capaz de realizar una manicura semipermanente. Todo lo que tienes que hacer es aprender y seguir los pasos establecidos en el orden correcto. En muy poco tiempo te convertirás en una auténtica profesional de la manicura semipermanente. Descubre lo que tienes que hacer para que tus uñas luzcan espectaculares.

Reúne los productos y accesorios necesarios

Antes de hacerte una manicura semipermanente en las uñas, tienes que preparar todos los productos, accesorios y equipamiento necesarios. Necesitarás elementos como una capa base, una capa superior y un esmalte híbrido de tu color favorito para el diseño de uñas. También son obligatorios un limpiador con el que tendrá que desengrasar la placa de la uña y un quitaesmalte híbrido, pero esto sólo será necesario para los tops clásicos. Los tops etiquetados como «no wipe» ya no necesitan líquidos de lavado especiales.

También necesitarás una lima de uñas, palillos de madera o un quita cutículas, un bloque pulidor, algodones sin polvo y acetona para eliminar el híbrido. Recuerda elegir una acetona de buena calidad que no dañe la protección natural de la uña.

Para realizar un diseño de uñas híbrido, necesitarás una lámpara de uñas para curar cada capa de la manicura por separado.

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Prepare primero la placa de la uña

La durabilidad de toda la manicura semipermanente depende de la correcta preparación de la placa de la uña. Por lo tanto, es aconsejable ocuparse primero de las cutículas que rodean la uña: sepárelas de la placa de la uña con un palito de madera o un aspirador. Si es necesario cortar las cutículas, debe hacerse en este momento. A continuación, hay que acortar las uñas y darles la forma deseada. Lo mejor es hacerlo con una lima bien elegida. Es importante hacerlo con cuidado porque después de aplicar el híbrido, básicamente cualquier limado de las uñas dañará el esmalte.

Por último, hay que matear la placa de la uña con un bloque pulidor y limpiarla con un bastoncillo de algodón empapado en limpiador. Esto mantendrá la superficie de la uña desengrasada y limpia, lo que tendrá un efecto positivo en la longevidad de toda la manicura.

Aplica la capa base, el esmalte híbrido y la capa final.

Debe aplicarse una fina capa de esmalte base transparente de manera uniforme sobre toda la superficie de la uña, asegurándose de mantener una distancia prudencial con las cutículas. Si la capa base «inunda» las cutículas, la manicura no se mantendrá bien. Aplique la capa base a las uñas de una mano y cúrelas en una lámpara, después haga lo mismo con la otra mano.

A continuación, aplica una primera capa fina de esmalte híbrido y cura de forma similar en la lámpara. Haga lo mismo con la segunda capa de esmalte y, por último, aplique un top coat y cúrelo también en la lámpara. Si utiliza un top coat clásico, límpielo con un bastoncillo de algodón empapado en quitaesmalte híbrido después del curado. Si el top coat es «no wipe», no es necesario hacer nada más. El último paso es aplicar aceite para cutículas y ya puedes disfrutar de una bonita manicura semipermanente.

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